Si bien es sabido que los tatuajes más pequeños, de estilo minimalista y que cuentan más por el valor sentimental que por su apreciación son quizás los más habituales, para los más fanáticos de la tinta, aquellos que narran su cuerpo por imágenes y dibujos, hay un estilo que ha empezado a despuntar, una variedad donde la originalidad y el color son los grandes protagonistas. Hablamos de los tatuajes de acuarela.
Muchos ya han caído en la tentación de hacerse con un ‘tattoo’ así. Eso sí, aunque esta moda tiene muchos fans, también hay algún que otro detractor en lo que a aspectos prácticos se refiere. ¿La razón? Dicen que este tipo de tatuajes dura menos que el resto, ya que al no tener bordes negros, la tinta de colores (que tiene otros pigmentos) se expande y se disuelve. Si quieres uno, debes saber que tienes la opción de hacértelo con tinta negra o sin ella. De la primera forma, será más difícil que se difumine con el tiempo.
Se han vuelto en un habitual para miles de personas y cada vez aparecen con más frecuencia en Instagram. Realmente son muy similares a cualquier tatuaje tradicional a diferencia del sombreado que imita la técnica de las acuarelas y que provoca una explosión de tonalidades en nuestra piel. De gran tamaño o de trazados realmente finos y que apenas pueden verse, los tatuajes de acuarela cuentan con infinidad de opciones, tantas como tú quieras elegir. Con flores, con diversos animales, de estilo abstracto… todo vale para poner en práctica este estilo tan llamativo en la piel. ¿Te animas con uno?
