Cada vez son más las mujeres que no disponen de tiempo para tomar el sol o, simplemente, no desean usar una cabina de rayos UVA. Para todas ellas, hay una solución rápida, segura y no perjudicial para la piel: el bronceado con caña de azúcar o DHA (dihidroxiacetona)
Se trata de una técnica cien por cien natural que se realiza en centros de estética y que te permitirá lucir una piel bronceada de forma inmediata (cuatro horas después ya empiezan a observarse los resultados) y en una única sesión.
Pero, y ¿en qué consiste este sistema? con una “pistola aplicadora” se dispensa la DHA (derivado de la caña de azúcar), de forma uniforme, por todo el cuerpo o por aquellas zonas que se pretende broncear.
Es entonces cuando esta sustancia reacciona en la capa más superficial de la piel al entrar en contacto con los aminoácidos libres de las proteínas cutáneas (la queratina), produciendo una reacción natural que broncea la superficie de la piel sin necesidad de que se active el mecanismo de bronceado normal, la melanina
Ventajas:
-Su inocuidad: solo actúa en las capas más superficiales de la piel.
-Es la solución perfecta para bodas, bautizos y comuniones ya que asegura un bronceado inmediato.
-Se puede escoger el grado de bronceado
-No es incompatible con el sol
-Puede ser aplicado en mujeres embarazadas
Inconvenientes:
-Los resultados solo duran siete días
-Hay que evitar las piscinas de cloro
-El precio ronda los cuarenta o sesenta euros
