Después de la fiebre por los champús naturales y por el aceite de coco, ahora pisa con fuerza otra tendencia capilar: la ronquina, el nuevo producto de moda. ¿Pero qué es la ronquina? Se trata de un combinación de dos extractos de plantas tradicionales, la quina y el romero. A este ingrediente se le atribuyen propiedades anticaída y de crecimiento del cabello. El mecanismo de acción es muy sencillo, tiene la habilidad de crear una película protectora sobre la fibra del pelo, ayudando a neutralizar los efectos negativos de la contaminación junto a otros fenómenos atmosféricos e incluso tensioactivos agresivos que encontramos en algunos champús. Este producto para el cuero cabelludo no es nada nuevo. De hecho, está en el mercado desde hace más de 20 años.
La ronquina contiene principios activos de medicina tradicional: esto implica que algo de realidad pueden tener los efectos que notan aquellos que la prueban, pero no hay nada que confirme que la ronquina de verdad sirva como un tratamiento específico para el crecimiento del cabello. No hay ninguna evidencia científica. Además, cabe destacar que el romero es fotosensibilizante (su administración puede provocar que el cuero cabelludo reaccione de forma anormal a la exposición solar) y este tónico lleva muchísimo alcohol, así que no es recomendable para personas con el cuero cabelludo sensible e irritado. Desde el punto de vista médico, se puede utilizar como un producto cosmético, pero no se recomienda como un tratamiento para tratar la alopecia. El mayor problema es su aroma característico que puede no gustar. Es un producto que funciona, pero no en todos los casos, en especial aquellos unidos a causas genéticas.
Usos
Hay muchas formas de usar este producto natural. Se recomienda aplicarlo sobre el cabello seco y limpio, por lo menos, una vez a la semana. Para que funcione hay que masajear el cuero cabelludo unos minutos. Así, al estimular las circulación, el producto penetra mejor y se conseguirán mejores resultados. También hay quien lo usa a diario. Eso dependerá de las necesidades de tu pelo –si lo tienes muy graso deberías usarlo una vez a la semana– y de tus gustos.