La temporada de verano es perfecta para disfrutar de la playa y del sol. Sin embargo, es algo perjudicial para la piel. Por eso, hay que incidir en la aplicación de protectores solares con frecuencia para evitar afecciones cutáneas.
También, con el objetivo de reducir la aparición de manchas, que suelen aparecer con más frecuencia durante esta época del año. Si no cuidas bien tu piel, es probable que luego tengas que tratarlas e incluso algunas cueste quitarlas.
1. El protector solar, el mejor aliado contra las manchas
Si hay un producto que te salvará siempre de la aparición de manchas es el protector solar. Hay que usarlo todo el año para contar con una piel bonita y agradecida. También con el objetivo de prevenir el envejecimiento prematuro de la piel.
Si usas con frecuencia protector solar es probable que tu piel tenga mejor aspecto y se converse mejor durante años. Sobre todo en verano, si quieres proteger la pie del sol y evitar manchas, hay que incidir en la utilización de los fotoprotectores.
2. Evitar los momentos de alta radicación, exfoliantes o ácidos durante el día
Los exfoliantes muy agresivos pueden dañar la piel durante el verano y causar manchas. Incluso también algún tipo de ácido, por lo que es importante que los evites si vas a exponerte al sol con mucha frecuencia.
3. Elegir activos que no sean retinol
El retinol es un activo muy popular y bastante utilizado por muchas mujeres. Cuenta con muchísimos beneficios para la piel. No obstante, es cierto que en verano deberíamos paralizar su uso si vamos a exponer la piel al sol. En su defecto, podemos seguir utilizando otros despigmentantes más apropiados.
4. Tratamientos post-verano
En verano no se recomiendan hacer tratamientos para las manchas muy invasivos. Es mejor esperar a después del verano para unificar el tono. Algunos de esos tratamientos que se suelen usar son el Hydrafacial, JetPeel, Alma Q y el tratamiento en cabina de Pigm 400, de Biologique Recherche.