Cada vez más, estamos viendo una tendencia creciente en la industria de la protección solar (que ya se está reflejando en las redes sociales y en los editoriales de belleza): las cápsulas solares. Estas pequeñas cápsulas contienen nutrientes específicos que mejoran el bronceado y prometen protegen nuestra piel del sol desde adentro hacia afuera. ¿Pero cómo funcionan realmente estas milagrosas cápsulas solares y qué es lo que las hace tan populares?
Las cápsulas solares están compuestas por una mezcla de nutrientes que están diseñados específicamente para mejorar la capacidad de la piel para broncearse y protegerse de los rayos UV. Los ingredientes más comunes de estas cápsulas incluyen vitaminas, antioxidantes y carotenoides. Estos nutrientes trabajan juntos para mejorar la salud de la piel y aumentar la producción de melanina. El pigmento que da color a tu piel y la ayuda a protegerse de los rayos UV.
¿De qué están compuestas las cápsulas solares?
Uno de los nutrientes más importantes en las cápsulas solares es el betacaroteno. Se encuentra en vegetales y frutas de color naranja y amarillo, como las zanahorias y los melocotones. El betacaroteno es un precursor de la vitamina A, que es esencial para una piel saludable. Cuando se ingiere en cantidades suficientes, el betacaroteno se convierte en vitamina A en el cuerpo, lo que ayuda a fortalecer la piel y reducir el riesgo de quemaduras solares.
Otro nutriente clave en las cápsulas solares es la vitamina E. Un antioxidante que protege la piel del daño causado por los radicales libres. Los radicales libres son esas moléculas inestables que pueden causar daño celular y contribuir al envejecimiento prematuro de la piel. La vitamina E neutraliza los radicales libres y protege la piel de su daño.
Además de estos nutrientes, las cápsulas solares también pueden contener otros ingredientes que ayudan a mejorar la salud de la piel, como el licopeno, un antioxidante que se encuentra en los tomates, la sandía y otros vegetales rojos, y el ácido hialurónico, que hidrata y mejora la elasticidad de la piel.
¿Cómo estas cápsulas ayudan a mejorar el bronceado y proteger la piel del sol?
La respuesta se encuentra en la producción de melanina. La melanina es el pigmento que da color natural a la piel, y también es responsable de protegerla de los rayos UV. Por lo tanto cuanto más melanina produce la piel, más protección tiene contra los rayos solares y menos probabilidades hay de quemarse (y más de broncearse).
Eso sí, es muy importante dejar claro que las cápsulas solares no deben ser utilizadas como una alternativa a la protección solar externa, como el uso de los protectores solares. Las cápsulas solares son un complemento para mejorar la protección de la piel y el bronceado. Pero en ningún caso deben ser utilizadas como una medida de protección solar independiente. No son suficiente y podrías causarte graves daños en tu piel.
Por lo tanto las cápsulas solares suponen una muy buena opción que te ayudará a conseguir un extra de protección contra los rayos solares durante los meses de buen tiempo. Al mismo tiempo potenciará la producción de melanina en tu piel impulsando un bronceado más rápido y duradero.
